Este cerro cordobés guarda miles de incógnitas que impactaron e impactan a toda la humanidad. Descubrí acá sus enigmas.
Por Camila Gomez.
En el Valle de Punilla, a 4 kilómetros de la zona céntrica de la localidad de Capilla del Monte, se encuentra ubicado el famoso Cerro Uritorco. Gracias a su historia repleta de hechos místicos, es considerado uno de los centros energéticos más importantes de la Argentina.
Su nombre proviene de la lengua quechua y significa “Cerro Macho”, haciendo referencia a su gran altura. Los excursionistas que se animen a escalarlo, mientras ascienden, comenzarán a ver fascinantes panorámicas de la región. Al llegar a la mitad del recorrido, se encontrarán una especie de predio que suele ser utilizado como campamento, donde los viajeros levantan sus carpas y viven asombrosas jornadas sobre esta mítica colina. Desde allí, restan 45 minutos de caminata para llegar a la cima, en donde hay una pequeña cruz y, sobre ella, distintos objetos que las personas dejan en forma de ofrenda.
Historia indígena
Los mitos y leyendas forman parte de la experiencia turística. Muchos afirman haber visto ovnis o luces sobrevolando los alrededores del Uritorco. Pero toda la magia comenzó muchos años atrás con los comechingones, quienes lo veían como un espacio sagrado, místico y religioso, en el cual llevaban adelante diferentes rituales.
La tradición cuenta que esta comunidad tenía la capacidad de observar fenómenos lumínicos y entidades que circulaban sobre el cielo. Ellos consideraban que era una manifestación de los espíritus de sus antepasados. Además, cuando tenían alguna dolencia y querían sanar, acudían a su gran hospital natural donde había una abundancia de hierbas y chamanes que los ayudaban.
Lo mismo hacían cuando querían finalizar con su vida en este plano: subían el cerro Charalqueta, se encontraban con el chamiquero, quien preparaba una poción que les facilitaba el salto vacío. Si los cuerpos no aparecían es porque se habían integrado al todo.
La pérdida involuntaria se hizo moneda corriente en el año 1574, cuando los conquistadores llegaron al territorio y los invadieron en busca de oro. Los comechingones dieron batalla y eliminaron al mandatario, pero los volvieron a rodear y resistieron bajo la supervisión del cacique Onga. Al verse en aprietos, escaparon a los cerros. Los invasores los siguieron y decidieron finalizar la tarea encomendada, desatando una matanza donde murieron más de 1.800 mujeres, hombres, ancianos y niños.
Avistaje de ovnis
A pesar de la gran historia que da vida al Uritorco, el reconocimiento mundial llegó muchos años después debido a los casos expuestos de avistaje a fenómenos extraños:
Enero 1986: Dos testigos -Gabriel y Esperanza Gómez- vieron como una nave extraterrestre dejó una huella de 122 metros de largo y 64 de ancho, la cual es considerada una de las más grandes quemazones que se puede divisar en el terreno.
Agosto 1986: Otro hecho sobre la misma huella impactó a todo el mundo. Se incendiaron 20 kilómetros de la sierra, excepto los 122 metros que rodeaban la quemadura ocurrida en enero. El espacio estaba intacto, como si nada hubiera pasado.
Enero 1988: Fue un suceso observado por 300 personas. Los testigos cuentan que sobre el cerro Overo, una nave con luces de color rojo -que producían una especie de relámpago- dejó una huella de 42 metros.
1991: El pueblo Carrizal descubrió una quemazón de 12 metros con una temperatura de 340 grados centígrados. Sobre ella, dos místicos hicieron una meditación con la intención de llegar al origen de la misma. Al realizarla, tuvieron una visión donde vieron dos naves: una suspendida en el aire y otra bajo tierra, ambas con luces muy poderosas que proyectaron un rayo de energía en el sitio, provocando que se aceleren las moléculas de la tierra. Según los espiritistas, este hecho fue el que generó la quemadura.
Estos casos no son los únicos que sucedieron, pero sí los más conocidos. Sin embargo, otra creencia que suele circular es la existencia de una ciudad subterránea debajo del Uritorco, denominada Erks (que en idioma irdín significa Encuentro de Remanentes Cósmicos Siderales). Es considerada una base extraterrestre donde se produce el intercambio de información entre las distintas galaxias.
Foto: Córdoba Turismo.