QUESOS, TRUFAS y ARÁNDANOS: dos destinos de la provincia de BUENOS AIRES que te van a SORPRENDER
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El sudoeste bonaerense posee lugares como Coronel Suárez y Pigüé, en los que visitantes y turistas pueden disfrutar del campo y al mismo tiempo degustar de la producción local de trufas, quesos, chocolates y arándanos, manjares cautivantes que ofrece la región.
A pocos kilómetros de Sierra de la Ventana, y a 545 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires, Coronel Suárez, aparecen empredimientos familiares de chocolates y árandanos que ofrecen mermeladas y variedades de jugos frutales, tomate, zanahorias y remolacha.
El circuito sigue por el sudoeste, desde Pigüé a Saavedra, en un camino serrano en el que se pueden apreciar diversos paisajes y saborear manjares exclusivos con sabores locales.
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Trufas en territorio bonaerense
Un ícono de la región, que se produce en la localidad de Espartillar, a unas 6 horas de coche por ruta desde CABA, es la famosa trufa negra, reconocida por su increíble propiedad aromática. Este pueblo de 800 habitantes es el principal productor de todo el país.
Según afirma la Subsecretaría de Turismo bonaerense, en 2016 Trufas del Nuevo Mundo obtuvo su primer hongo y al año siguiente comenzó la cosecha. Desde ese momento, multiplicó la producción y en 2020 inició exportaciones a Francia, España, Estados Unidos y Dinamarca.
“En el corto y mediano plazo buscamos llegar a Asia”, dijo Faustino Terrada, encargado de la comercialización.
Se trata de un hongo comestible que elige las raíces de los árboles para crecer y como está bajo tierra -para encontrar las preciadas trufas- resulta imprescindible la ayuda de perros con excelente olfato y entrenados.
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El hongo no crece en cualquier campo, es originario del hemisferio norte y no se encuentra naturalmente en suelo argentino.
“La trufa principalmente es aroma y después viene el sabor, que es completamente distinto al aroma y, para fijarlo, es muy importante emplear alimentos con materia grasa, por eso en las elaboraciones tratan de utilizar huevo y manteca. Todos los volátiles se fijan y de esa forma se traslada el aroma al sabor. De lo contrario el sabor es menos intenso”, detalló Terrada.
La ruta de la miel
También en Pigüé se puede disfrutar de la denominada Ruta de la miel, en la que, con visitas guiadas que ofrece el municipio se puede conocer los productos y procesos productivos, como la confección y venta de indumentaria para el apicultor, elaboración de velas y de miel, en los emprendimientos que conforman esta ruta en el partido de Saavedra.
También se pueden adquirir piezas únicas elaboradas de manera artesanal con arcilla, las cuales contienen en su confección, cera de abeja.